No me interesa saber
qué se siente querer a alguien de la manera que se quiere a un hijo.
No me interesa la
paternidad ni cuidar, proteger, amar a alguien más aparte de mí.
No me interesa
trabajar, para él o para ella, mucho menos, cansarme, sufrir para darle lo mejor.
No me interesan los
anhelos que mis padres tienen respecto a ese asunto; en abuelos no los voy a convertir yo.
No me interesa crear
un hijo, pues no tengo empleo fijo, es decir, dinero estabilidad y tampoco quiero que mis padres
me ayuden con eso que ha nacido.
No me interesa
abrazar, mecer, proteger, educar, consentir, dar afecto, ni cambiar mi vida por otro.
No me interesa comprar ropa para bebés, ni
zapatos diminutos, cunas ni nada parecido.
No me interesa que
alguien me ame incondicionalmente (Ese sentimiento de incondicionalidad es
falso).
No me interesa bautizar
a nadie, mucho menos asistir a su hipotética primera comunión, graduación,
matrimonio, etc.
No me interesa ser
débil, dependiente afectivo, manipulable, sensiblero ni sufrir por otra
existencia.
No me interesa ser
como la gran mayoría, es decir, padres comunes y corrientes.
No me interesa recibir
visitas de familiares ni de los vecinos yendo a casa a ver al bebé y verlos
comportarse como idiotas frente a la criatura.
En resumidas cuentas, pediré que me hagan la vasectomía y ojala funcione...
Comentarios
Publicar un comentario